En un momento de hiperconexión y mayor digitalización, las necesidades de las empresas son cada vez más complejas y el talento especializado para resolverlas es cada vez más escaso. Ante esto, el enfoque educativo tradicional ya no es suficiente, plantean especialistas vinculados a la industria.
Uno de los desafíos que desde hace varios años enfrentan las empresas en sus procesos de adopción de tecnología como pieza clave para su operatividad es el de encontrar a los perfiles adecuados para enfrentarlos con éxito. No ha sido fácil, considerando que solo en 2020 hubo más de un millón de puestos laborales en el área de tecnología, según reportó el Banco Interamericano de Desarrollo. Pero fueron menos de 100 mil estudiantes del rubro los que se titularon en toda la región.
Para Nicolás Goldstein, presidente ejecutivo de Accenture Chile, esos números evidencian una brecha “dramática” para responder a la demanda de habilidades y talento calificado. Y si en 2020 fueron un millón de puestos, la proyección que hace Roberto Alfaro, gerente general de SCM Chile, es que pronto pueden ser cinco o diez millones. Todo esto ocurre en un momento clave, en que muchas compañías necesitan escalar tecnologías y, por lo tanto, las capacidades de los profesionales deben ser otras, insiste Rebeca Márquez, Head of IT & Digital Recruitment de Robert Walters Chile, quien detalla que hoy lo que más se busca son perfiles que tengan adaptabilidad al cambio, con habilidades técnicas como lenguaje SQL, Business Intelligence, Java, JavaScript y Linux.
“En la industria tecnológica y digital esta brecha de especialistas cobra aún más relevancia”, asegura Cecilia Aceituno, jefa de Aprendizaje de Entel. “La formación de talentos digitales es un desafío que está en el corazón de cualquier empresa del rubro que pretenda mantener su posición de liderazgo y su futuro en un contexto de evolución tecnológica acelerada”.
Otros Canales De Formación
La ejecutiva de Entel resalta que, frente a la impresionante velocidad de los cambios tecnológicos, los mecanismos tradicionales de formación ya no son suficientes. Por ello, dice, “se requiere una actualización permanente de conocimientos, de forma rápida y específica a la necesidad de los talentos”. Frente a este escenario, Alfaro cree que los empleadores deben cambiar su perspectiva. “Tenemos que dejar de pensar en los trabajadores capacitados para trabajar en nuestras empresas como aquellos que completaron una carrera profesional”, afirma. Esto ha llevado a que cada vez tomen más peso las certificaciones en diferentes áreas de la industria o el talento y las habilidades que los postulantes puedan demostrar, incluso aquellos perfiles más autodidactas.
“El talento digital es amplio y tiene muchas aristas relevantes, por lo que una estrategia de aprendizaje debe definir bien sus audiencias y las necesidades del negocio. Un foco importante son los nuevos talentos, que hoy buscan mezclar sus conocimientos con la experiencia”, coincide Aceituno, y destaca que, teniendo eso en cuenta, nació la Academia CIO de Entel, dirigida a personas recién egresadas cuyo interés es desarrollarse en la línea digital. Se trata de un programa trainee para formar desarrolladores mientras aprenden de las áreas core del negocio no solo de Entel, sino de la industria. “Queremos contribuir tanto con el desarrollo de los futuros profesionales, recién egresados de las más diversas carreras, así como de aquellos talentos hoy presentes en la compañía que se ven desafiados permanentemente”, señala la ejecutiva.
Más mujeres y más capacitación
Los expertos coinciden en que sumar más mujeres a la industria también ayudará a reducir las brechas. A Goldstein le preocupa, por ejemplo, que la participación femenina en data e IA alcance apenas un 26% y en cloud computing un 12% a nivel mundial, una situación que en Chile no es diferente y que es urgente cambiar.
Apostar por estrategias de aprendizaje a lo largo de la vida también puede dar buenos resultados. Así lo propone el recientemente publicado estudio “El Futuro de la Educación: Innovación, tecnología y habilidades del siglo XXI”, de Fundación País Digital (FPD) y Accenture, que releva la experiencia de distintos países en la creación de este tipo de estrategias, como un paso esencial en el desarrollo humano y económico. “Hoy es clave avanzar en la creación de una estrategia de aprendizaje a lo largo de la vida, tal como lo han hecho países desarrollados. Esto implica educar desde las bases en una experiencia que permita el desarrollo de habilidades que acompañen a las personas durante todo su ciclo de vida y durante toda su trayectoria profesional”, plantea Catalina Araya, directora de Educación de FPD. En ese sentido, habilidades como la resolución de problemas, la creatividad, la curiosidad y la flexibilidad son claves para enfrentar los desafíos de una sociedad hiperconectada y tecnologizada.
Fuente: Diario Financiero