El impacto de la inteligencia artificial en la productividad laboral

La inteligencia artificial (IA) tiene el potencial de impactar significativamente la productividad de la fuerza laboral en diferentes aspectos como operaciones, planificación y gestión. Esta tecnología, que alguna vez perteneció al ámbito de la ciencia ficción, se ha convertido en una herramienta esencial para las empresas que buscan mantenerse a la vanguardia en un mundo competitivo.

En las operaciones diarias, la IA puede optimizar, agilizar y automatizar diversas tareas, liberando a los empleados de algunas que son más repetitivas y permitiéndoles la oportunidad de enfocarse en las que son más estratégicas o que requieren mayor creatividad. Claudio Fuentes, head of Workforce Consultancy en SCM Latam, explica que la IA posibilita el descubrimiento de nuevas necesidades de la operación y de los colaboradores de forma anticipada, facilitando la gestión de los tiempos muertos o de inactividad e incluso maximizando la productividad.

Además, la IA mejora la calidad de los procesos de producción y de gestión, reduciendo tanto ineficiencias de operación como ineficiencias de programación de horas de trabajo. Los algoritmos de IA analizan datos históricos y métricas de rendimiento para optimizar la asignación de recursos, asegurando una utilización más efectiva y eficiente de la fuerza laboral. Los modelos de previsión de demanda basados en IA permiten además anticipar patrones futuros de demanda con mayor precisión, facilitando una planificación de personal de producción, atención y venta, entre otros, más acertada.

La IA ayuda a simular diferentes escenarios para tomar decisiones informadas sobre planificación y asignación de recursos en un entorno cambiante. En términos de gestión, la IA empodera a gerentes y líderes con decisiones basadas en datos. Mediante análisis impulsados por IA, se puede realizar un seguimiento del desempeño de los empleados, identificando fortalezas y debilidades para mejorar continuamente. La IA también analiza comentarios y métricas de compromiso de los empleados, lo que permite identificar áreas de preocupación y tomar medidas específicas para mejorar la moral y la productividad.

En el proceso de adquisición de talento, la IA agiliza la selección de candidatos adecuados mediante análisis de currículums y entrevistas iniciales automatizadas. La IA transforma la forma en que las empresas operan, planifican y gestionan su fuerza laboral, mejorando la productividad y competitividad. Sin embargo, para una implementación exitosa, es necesario abordar cuidadosamente las implicaciones éticas, asegurar la privacidad de los datos y llevar a cabo una gestión del cambio efectiva para una transición fluida y una aceptación óptima dentro de la fuerza laboral.

Diversos expertos coinciden en que, desde la Revolución Industrial, pocas tecnologías han tenido un impacto tan profundo en la productividad laboral como la inteligencia artificial (IA). Danilo Naranjo, fundador y director Wingsoft, apunta que, en primer lugar, la IA ha permitido la automatización de tareas repetitivas y tediosas, liberando a los trabajadores para que se enfoquen en labores más complejas y creativas. Esto no solo ha mejorado la eficiencia operacional, sino que ha elevado la calidad del trabajo, al reducir errores humanos en procesos críticos.

El análisis de grandes volúmenes de datos, por ejemplo, se realiza ahora en cuestión de segundos, ofreciendo insights valiosos que anteriormente hubieran requerido semanas de análisis manual. La IA ha propiciado, además, la creación de entornos laborales más dinámicos y personalizados. A través del análisis predictivo, las empresas pueden ahora anticiparse a las necesidades de sus empleados y clientes, adaptando sus estrategias de manera proactiva. Este nivel de precisión y adaptabilidad, antes impensable, ha llevado a una mejora en la satisfacción del cliente y, por ende, en la rentabilidad empresarial.

En esta nueva era, la adaptabilidad y la innovación son esenciales, y es evidente que la IA será el catalizador que impulse a las empresas hacia un futuro más próspero y eficiente.

 

Fuente: El Mercurio

Últimas noticias